De piraguas por el manglar

Deportes acuáticos

Corales de colores vivos, peces tropicales y cálidas aguas trasparentes... Bonaire ofrece grandes experiencias de buceo. El fondo del Mar del Caribe está lleno de pecios de navíos, ofreciendo a los buceadores experiencias únicas y emocionantes.

Playa

Para ser una isla tan pequeña, Bonaire cuenta con un gran número de restaurantes. Y por supuesto, muchos de ellos se encuentran justo en la playa, con vistas al océano. Disfrute de una espectacular puesta de sol y vea cómo el sol desaparece en el horizonte.

Activas y al aire libre

La danza y la música tienen un lugar especial en el corazón de la gente de Bonaire. Hay mucho más que descubrir en Bonaire aparte del fabuloso mundo submarino y las extensas playas, como se puede ver rápidamente durante una de las numerosas festividades nacionales de esta isla caribeña.

Deportes acuáticos

El fabuloso mundo submarino es una de las mayores atracciones de Bonaire. Amantes de la naturaleza viajan de todas partes del mundo a la isla donde el snórquel es una actividad muy popular. Tan sólo con un par de aletas y unas gafas de buceo, se puede disfrutar de las criaturas únicas que habitan el Mar del Caribe.

Deportes acuáticos

El mar azul celeste, el agua cristalina y un mundo submarino lleno de color; Bonaire es uno de los destinos de buceo más populares del mundo. Y con razón, ya que toda la costa es una reserva natural protegida y presume de playas intactas, espectaculares arrecifes de coral y una vida marina impresionante.

Playa

Bonaire es uno de los destinos de deportes acuáticos del mundo, gracias a sus aguas de azul celeste, sus vientos del este y su agradable clima caribeño. Por ello no sorprende que la isla haya producido tantos campeones de surf. Los amantes de los deportes acuáticos encontrarán un fantástico campo de juegos en el mar de Bonaire. Las aguas en su mayoría poco profundas son cálidas e invitan a los surfistas a pasar días enteros puliendo su habilidad.

Playa

Arrecifes de coral rojo y negro únicos, manglares y un océano azul celeste: las playas de Bonaire son tan bellas como variadas. La mayoría de las islas caribeñas cuentan con extensas playas blancas, pero Bonaire es conocida por sus íntimas bahías de áspera y rosada arena llenas de una tranquila y abundante vida marina.

Activas y al aire libre

Galopar en playas de arena blanca, darse un chapuzón, con caballo incluido en el mar turquesa del Caribe… ¡demasiado bueno para ser verdad! Montar a caballo sobre el escarpado paisaje de Bonaire es una experiencia inenarrable. Súbase a la silla de montar y explore las insólitas formaciones de roca, los manglares y los flamencos rosas de Bonaire.

Naturaleza

En el noroeste de Bonaire se encuentra el Parque nacional de Washington Slagbaai. Con al menos 5.600 hectáreas de naturaleza virgen, el parque cubre una quinta parte de la isla. Establecido en 1969, es el primer parque nacional de las antiguas Antillas Holandesas. El parque se compone de playas, dunas de arena, bosque, manglares y salinas.

Arte y cultura

En el centro de Kralendijk, la capital de Bonaire, se encuentra Fort Oranje. Datando de 1639, la pequeña fortaleza es el edificio de piedra más antiguo de la isla. Lleva el nombre de la familia real holandesa y recuerda a los visitantes de la historia colonial de la isla. Con el faro a la vista mar adentro, los barcos holandeses podían llegar a salvo al puerto.

Deportes acuáticos

A unos 800 metros de la costa de Kralendijk, la capital de Bonaire, se encuentra la pequeña isla deshabitada de Klein Bonaire, una reserva natural protegida que forma parte del Parque Marino Nacional de Bonaire. La isla, que tiene una superficie de unos 6 kilómetros cuadrados, es muy popular entre los buceadores por el arrecife de coral negro que comienza en la playa y desciende hasta una profundidad de 35 metros. Además de los coloridos peces, también hay caballitos de mar y tortugas raras.