La playa de los 1.000 escalones
La promesa de una playa remota y un océano rebosante de coral hace que merezca la pena descender los 1.000 escalones. Pero no se preocupe, la excursión hasta la playa son ‘sólo’ 72 escalones. Esta zona es perfecta para buceadores de todos los niveles: la profundidad media es de 20 metros y el arrecife comienza justo en la costa. Una vez sumergido, observará una amplia diversidad de animales marinos, incluyendo delfines, tiburones peregrinos, tortugas carey y rayas.
Una inmersión especial
A los lugareños les encanta sumergirse en Something Special (Algo especial), no tanto por el coral, sino sobre todo porque está repleto de vida marina. Se pueden ver mantarrayas deslizándose sobre el fondo arenoso y, en algunos rincones, las anguilas de jardín asoman sus cabezas –algo digno de ver. Estos peces únicos entierran la mayor parte de su cuerpo bajo la arena y sólo asoman la cabeza desde su madriguera, como plantas que crecieran en un jardín. Something Special es apto para principiantes y de fácil acceso desde el puerto deportivo. Aquí también se puede disfrutar de una inmersión nocturna.
Cámara en mano
Karpata, en la zona noreste de Bonaire, es una de las áreas de buceo más populares de la isla. Lleva el nombre de una finca en la costa y los buceadores acceden al agua desde su embarcadero. Aquí el agua está en calma y hay buena visibilidad, por lo que es perfecto para principiantes. En algunas zonas, el arrecife desciende abruptamente, y ahí podrá observar algún ancla vieja en el fondo. Gracias a la claridad del agua, los buceadores pueden tomar unas fotografías estupendas de caballitos de mar, peces ángel, corales cuerno y mucho más.