Una valiosa falsificación
El fechado por carbono confirma que el sudario es de hace seis o siete siglos. Una edad respetable, pero que no coincide con la fecha en que murió Jesucristo. Gracias a los avances tecnológicos, los investigadores pueden indicar el origen de la tela con más precisión que nunca. El debate en torno al sudario surgió por primera vez a finales del siglo XIX, cuando se introdujeron técnicas de fotografía más precisas. El sudario parecía mostrar la impresión de un hombre con lesiones similares a lo que conocemos sobre la crucifixión. Todavía no está claro como se creó la impresión.
Teorías descabelladas
Una de las explicaciones más fascinantes de la impresión en el lienzo es que fue creada por Leonardo da Vinci. El genio del siglo XV habría usado una cámara oscura y fosfato de plata para producir un negativo, utilizándose él mismo como modelo. Según otra teoría, la tela no era el sudario de Jesús sino el de Jacques de Molay, el último Gran Maestre de los caballeros templarios. También tuvo una muerte miserable, en un momento que coincide con el fechado de carbono. Ambas teorías no son más que rumores.